¿Qué es la astrología?
Cada vez que entras en contacto con cualquier modalidad del horóscopo, ya sea para conocer la personalidad de los signos del zodiaco, para averiguar la compatibilidad entre ellos o para leer tu horóscopo del día, están entrando en contacto con la astrología.
La astrología es la vasta disciplina que abarca el estudio del horóscopo occidental y que rige todo lo que de los astros podemos saber para regir nuestra existencia. A continuación, haremos una radiografía detallada acerca de su historia, los elementos que estudia, datos sorprendentes acerca de ella y la carta natal.
Historia de la astrología
Fue en la antigua Babilonia, cuando sus pobladores comenzaron a mirar al cielo en busca de fenómenos y patrones que pudieran indicarle lo que sucedería a continuación, que la astrología comienza a gestarse. Por otra parte, fueron también los babilonios quienes unieron las estrellas a medida que hallaban formas en ellas para así crear los mitos que dieron origen a los signos del zodiaco. Sin embargo, no fue hasta que el culto pueblo griego la adopta, que esta disciplina tan codiciada en la actualidad, entra en auge y comienza a desperdigarse por el resto del mundo.
Cuando el pueblo griego recoge los mitos babilónicos, los compila y agrega los suyos propios.
Las conquistas de Alejandro Magno le trajeron a Grecia mucho más que territorios y dominios. Gracias a ellas, este país se fue nutriendo de saberes y prácticas que hasta el momento le resultaban desconocidas. Después de que el conquistador llegara a los dominios de Persia, Babilonia, Asia central y Siria, Grecia adoptó la escritura cuneiforme como método para la comunicación a nivel académico.
Después de que Beroso, un sacerdote de Babilonia, viajara a la isla griega Cos a transmitir sus vastos conocimientos en astrología, el pueblo griego se asió a ella y la moldeó de acuerdo a sus necesidades. Por un lado, la astrología brindaba los elementos necesarios para comprender el comportamiento humano y predecir los acontecimientos futuros. Por el otro, era una forma de ascensión para que el espíritu alcanzara su máxima expresión.
A partir de este momento, la astrología pasó a ser la primera fuente de consulta de gobernantes y conquistadores cada vez que debían tomar una decisión táctica.
Elementos que estudia la astrología
El eje en torno al cual gira la astrología son los horóscopos. Si bien existen infinidad de ellos, esta disciplina solo se centra en el occidental, cuyos doce signos son abarcados entre Aries y Piscis. No obstante, los horóscopos se desglosan en un sinfín de maneras, en cuyas interviene la astrología de forma directa. ¿Cuáles son esos elementos? Los siguientes:
Fechas de los signos del zodiaco: el primer dato que nos aporta la astrología es la fecha de los signos del zodiaco. Cada signo está comprendido entre el día en que comienza a regir y el día en el que termina su dominio. Es curioso observar cómo un día puede hacer una gran diferencia en la personalidad de alguien.
Carácter y personalidad: otro aspecto por el que la astrología es muy buscada es el estudio del carácter y de la personalidad. Según el signo al que la persona pertenezca, se puede saber cómo es su forma de ser, de qué forma reacciona cuando se enfada y qué la hace feliz. A su vez, la astrología también nos cuenta cómo es cada signo en el amor, en la amistad y en el trabajo.
Compatibilidades: este es tal vez el beneficio astrológico más buscado de todos. Las personas quieren saber con quiénes se llevarán bien y con qué signos podrán lograr que su romance prospere.
Psicología: debajo de la personalidad de cada uno de nosotros, reside un submundo de emociones, motivaciones y miedos, llamado “psicología.” Existen dos psicologías en cada persona: una de ellas es la que se va forjando a medida que crece y que absorbe lo que su entorno tiene para ofrecerle, mientras que la otra viene impresa de nacimiento gracias al signo del zodiaco al que pertenece. La astrología se dedica a estudiar esta última psicología y a ayudarnos a comprender a los demás en base a su mundo interior.
Predicciones: otro aspecto que todos veneran de la astrología son sus predicciones. Podemos acceder a nuestro futuro de forma anual o mensual, lo que nos ayuda a organizar mejor nuestra vida en base a la energía de los astros. Sin embargo, también tenemos la posibilidad de acceder a nuestro horóscopo semanal y diario.
Horóscopo semanal: saber lo que nos ocurrirá durante la semana puede llevarnos a evitar una catástrofe o a propiciar un acontecimiento que hace mucho tiempo hemos venido esperando. Puedes
ver el horóscopo semanal aquí mismo.
Horóscopo diario: esta es información de último momento que ningún aficionado a la astrología debería prescindir de tener día a día. Aquí puedes
ver el horóscopo diario.
Planeta regente: cada signo tiene a su planeta regente, el cual la astrología estudia para aportarnos información acerca de nuestra personalidad y, muy especialmente, de nuestra forma de manejarnos en la vida.
Datos curiosos de la astrología
• La palabra “astrología” deriva del griego aster, cuyo significado es “estrella.”a
• El signo Aries, seguido por Sagitario, es el más conflictivo y el que más se rebela a la autoridad, algo que podemos corroborar si hacemos una encuesta de los signos del zodiaco a los que pertenece la mayoría de los convictos a lo largo y ancho del mundo.
• Hitler tomaba sus decisiones de acuerdo a lo que su astrólogo personal, Kart Ernst, le decía.
• La corte china tenía a sus propios astrólogos para que hicieran predicciones para sus emperadores. Si estas predicciones eran erradas o inexactas, el astrólogo era ejecutado.
¿Qué es una carta natal?
La carta astral es un documento personalizado que elabora el astrólogo a su solicitante. Se hace en base a la fecha y hora exacta de su nacimiento, por lo que nunca puede ser hecho de forma colectiva, y lo que hace es sacar una “fotografía” de cómo se encontraba el cielo en el momento del nacimiento. La posición de los planetas en el firmamento será clave para determinar cómo será la vida del consultante, qué retos deberá afrontar y cuáles serán sus oportunidades.